Nominada por Javier Gay de Liébana.

¿Cuál es el mejor consejo que alguien te ha dado?
Todo el mundo te da consejos incluso sin pedirlos. Mi padre fue una persona extraordinaria. Era inteligente, humilde, recto, ético, transparente, con mucho criterio, con carácter y con un gran corazón. Ese es mi mayor consejo, intentar seguir sus pasos.

¿Qué consejo nos darías?
La vida es muy corta para malgastarla en algo o alguien que te hace infeliz. No te conformes. Atrévete y cambia de rumbo. Y si tampoco funciona, vuelve a intentarlo. Seguro que acabaras encontrando tu lugar.

Una cualidad indispensable para liderar…
Una no, ¡varias! Debes ser experto en la materia, creo que no hay peor líder que el que no sabe. Valiente para tomar decisiones pensando en una mejora de calidad en el trabajo para todo tu equipo, aun sabiendo que habrá una parte que lo criticará. Ser humilde y reconocer los errores porque de ellos aprenderás y crecerás un poco más. Ser ejemplar en todas las acciones porque, así, tu equipo crecerá contigo y creerá en ti. No bastan las palabras. Hay que bajar cada día a las trincheras. No se puede liderar desde el despacho. Diría más cualidades pero lo dejo aquí…

Qué libro, podcast, canal de Youtube o contenido nos recomiendas…
Voy a recomendar varios. Por supuesto, el libro de mi querido amigo, Javier Gay de Liébana: “No te montes películas” y sus artículos los martes en Linkedin. También recomiendo los contenidos en Linkedin del Director de Inforesidencias.com, Josep de Martí Vallés. Y voy a recomendar otro libro que no dejo de ojearlo en mis momentos oscuros: “Paraules que curen”, de Àlex Rovira.

¿Qué personaje histórico te gustaría tener en tu equipo?
¡Vaya pregunta más complicada! Me voy a decantar por los grandes luchadores de los derechos humanos como Martin Luther King o Nelson Mandela. Son grandes ejemplos que hacen falta en los tiempos actuales de desencanto general. Con estos personajes, yo querría formar parte de SU equipo.

¿Has tenido siempre claro tu objetivo profesional?
Cuando era adolescente estaba en un vagón del metro en Barcelona con mi madre y había un niño con Síndrome de Down que empezó a gritar y a dar golpes contra la pared (un tiempo después entendí que tenía trastornos de conducta). La gente se apartó y yo dejé a mi madre y me fui hacia él para calmarlo. Se tranquilizó al poco rato. No soy capaz de recordar lo que hice, pero si algo tuve claro en ese momento es que me gustó. Que no sentí miedo y que después me sentí bien viendo al niño calmado.

A veces, no sabes porqué pero tienes una “iluminación” personal-profesional sin ser consciente aún. Unos años más tarde, hice voluntariado en una organización de atención a las personas con discapacidad y trastornos de conducta. Empecé a cuidar a dos hermanas pequeñas que necesitaban soporte generalizado, es decir, tenían discapacidad profunda y empecé a estudiar Pedagogía Terapéutica. Así que creo que la respuesta es SÍ, desde pequeña tuve claro que me gustaba ayudar y proteger a las personas. Me decanté profesionalmente por la diversidad funcional y personas mayores. Y, después de 28 años ejerciendo de Directora, aún no he cambiado de opinión. Debe ser que me gusta…

¿Cuál es la app más curiosa que tienes en tu móvil?
Voy a mirarlo… App curiosa no tengo ninguna, pero práctica, sí: Waze. Es la última que me he bajado. Me la recomendaron porque mi orientación conduciendo podría ser mejor. Y puedo decir que funciona de maravilla.

¿Qué presupone la gente sobre ti, y no es así?
Creo que mi imagen engaña. Puedo parecer delicada a primera vista, pero soy mujer todo terreno y un auténtico terremoto. Mi estado natural no es el sedentarismo precisamente, ni mirarme en el espejo…

¿Cuál crees que será la próxima revolución en tu sector?
Mi ámbito profesional es el sector residencial. Creo que la revolución ya ha empezado. En los países nórdicos nos llevan mucha ventaja, pero la parte positiva es que siempre podemos copiar los modelos que funcionan. Actualmente, hay una crisis importante en el sector residencial de atención a los mayores. Las macro residencias empiezan a hacer “aguas” a raíz de lo vivido durante la pandemia. Ciertamente, es necesario un cambio de paradigma. El ideal para trabajar aplicando la atención centrada en la persona y las dimensiones de calidad de vida, son las unidades de convivencia. Creo que esto será la revolución del sector junto con otros modelos que están desarrollándose en nuestro país como el cohousing; los apartamentos dentro de las residencias; conjuntos de viviendas con un edificio central con espacios comunes; viviendas ecológicas; micro comunidades; comunidades de retiro, etc. Ahora bien, eso se traduce en una ratios de personal más altos y, por supuesto, mayor inversión económica. Las administraciones deberían dar un paso al frente y apostar económicamente por el cambio. Es un ámbito poco valorado y nos olvidamos que nosotros vamos a necesitar tarde o temprano este recurso. Así que más nos vale ponernos las pilas.

¿Cuál es la última canción que has escuchado o recuerdas?
No es la última canción que he escuchado pero, a mí, el grupo que me encanta por la originalidad de las letras de sus canciones, por la voz del cantante y por el estilo de música que tocan, es la banda Love of Lesbian. Me fascinan.

Cuéntanos alguna vez que hayas metido la pata en el trabajo…
Después de tantos años de profesión, puedo prometer y prometo… ¡que muchas veces! Aunque tengo que decir que los conocimientos y la experiencia que vas adquiriendo con la práctica diaria, dulcifica las meteduras de pata. También te da la suficiente soltura como para reírte de ellas y crecer un poco más.

¿Qué admiras y no toleras en una persona?
No tolero la bajeza del ser humano en general, como la prepotencia, la gente vaga por naturaleza, los tóxicos, la falsedad, la impuntualidad, la falta de profesionalidad, la apatía, las malas praxis, la crítica destructiva, el racismo, la falta de respeto, la corrupción, los que se apropian de los éxitos de otros… ¿Quieres más?

¿Qué admiro? El antónimo de todo lo que acabo de decir. La buena gente en general. Esa que te transmite buenas vibras y miran la vida con positividad.

¿Cuál es la decisión más valiente que has tomado en tu vida?
Alejarme de personas tóxicas y alejarme de los trabajos que no me ilusionan.

¿Cuál es el primer momento que recuerdas en tu vida?
Me han venido a la cabeza dos situaciones anecdóticas de mi infancia que, después de tantos años, continúan asomando en algunas reuniones familiares.

La primera situación, pasó en la escuela cuando tenía 4 años y a mi amiguito John – que tenía 1 año más que yo -, le dieron un diploma al finalizar el curso. Me acuerdo que me enfadé porque yo había trabajado mucho y no entendía porque a mí no me daban un diploma. Al final, la profesora de mi amigo acabó haciéndome un diploma. En esa época ya apuntaba maneras…

La segunda situación que me viene a la cabeza, tenía yo 5 años y estábamos de vacaciones. Nos hicimos muy amigos con las familias que vivían en los apartamentos contiguos. Una tarde, nuestros padres nos dejaron un ratito a todos los niños juntos en uno de los apartamentos. Nosotros éramos los más pequeños. Cuando regresaron, los pequeños estábamos riendo desmesuradamente, nos caíamos sin ninguna razón, decíamos más tonterías de las que decíamos habitualmente… hasta que la mamá de la niña del apartamento donde nos quedamos todos los niños fue a la nevera a buscar la sangría que estaba dentro de una botella de Coca-Cola de 2 litros… ¡Estaba completamente vacía! Os podéis imaginar el capítulo siguiente… ¡Todos a urgencias! Os puedo decir que hemos crecido bien y sin ningún trauma.

¿A qué tres directivos/as te gustaría nominar?
Dani Jorquera, Gerente de PRODIS (Prodiscapacitats Fundació Privada Terrassenca).

Anna Cadafalch, Directora del Club Deportivo Terrassasports.

María Rosa Sanz, Vicepresidenta de ACAU (Associació Coordinadora d’ Ajuda Unida).